¿Querés inscribirte en la DGI como pequeño contribuyente? ¿No sabés si te corresponde ser parte del monotributo o del Literal E? ¡Estás en el lugar correcto! Aquí podrás encontrar una comparación completa entre ambos regímenes.
En esta oportunidad realizaremos una contrastación entre el Monotributo y la Pequeña Empresa (o Literal E), basándonos en los siguientes aspectos:
- Ingresos
- Actividad desarrollada
- Naturaleza jurídica del inscripto
- Puesto o local
- Ventas
- Personal ocupado
- Activos
- Pago a DGI
Ingresos
Comencemos entonces por el primer ítem. En el caso del Monotributo, el límite de ingresos es de hasta $ 1.074.997 anuales para unipersonal y de $ 1.791.662 anuales corresponde a una sociedad de hecho. Mientras tanto, en la Pequeña Empresa el máximo es de $1.791.662 anuales, es decir, lo mismo que para las sociedades de hecho en el Monotributo, pero mayor que para unipersonales.
Actividad desarrollada
Con respecto a la actividad desarrollada, en el Literal E se incluye toda actividad comercial o industrial que requiera el uso de capital y trabajo. Mientras que el Monotributista es aquel que realiza una actividad que utiliza también el capital y trabajo, pero lo hace específicamente en la vía pública, en espacios abiertos o en un pequeño local, tanto vendedores ambulantes como estables. Por ejemplo, el cuidado de automotores encajaría en el Monotributo.
Naturaleza jurídica del inscripto
En tercer lugar, nos encontramos con la naturaleza jurídica del inscripto. Para ser parte del Literal E, no hay condiciones en este ámbito, a diferencia del Monotributo para el cual sí las hay. Para este último solo se abarcan a unipersonales, sociedades de hecho de máximo dos socios y sociedades informales de hasta tres socios de la familia que se relacionen hasta el cuarto grado de consanguinidad o el segundo grado de afinidad.
Puesto o local
Expongamos ahora las diferencias sobre el puesto de trabajo de cada uno. En caso del Monotributista, no puede explotar más de un local a la vez y este no debe contar con una superficie ocupada superior a 15 mt2. A diferencia de la pequeña empresa que no tiene ninguna restricción sobre su espacio de trabajo.
Ventas
Por otro lado, con respecto a las ventas estos regímenes son similares, ya que ambos pueden realizarlas a crédito o al contado. Asimismo, ambos pueden vender tanto a consumidores finales como a empresas (incluso estatales). Esta última similitud surgió a partir del decreto 119/021 en conjunto con la Ley 19.942 que habilita a los Monotributistas a facturarle también a empresas para impulsar el desarrollo de los microemprendimientos.
Personal ocupado
En sexto lugar, también podemos realizar una comparación sobre el personal ocupado en cada uno. Las Pequeñas empresas no cuentan con un máximo permitido de empleados, mientras que los Monotributistas unipersonales pueden un trabajador solamente y las sociedades de hecho ninguno.
Activos
Continuemos entonces con los activos. En el Monotributo se puede contar con activos de hasta $ 895.831, es decir hay un límite, mientras que en el Literal E no hay condición alguna al respecto.
Pago a DGI
Por último, hablaremos sobre el pago al DGI. A los Monotributistas, por su parte, no les corresponde abonar a este organismo, mientras que las Pequeñas Empresas sí deben hacerlo y les corresponden este año $ 5.380 mensuales, ya que el monto cambia anualmente a partir del 1º enero.
En resumen, tanto el Monotributo como la Pequeña Empresa (Literal E) ofrecen diferentes ventajas y restricciones que deben considerarse cuidadosamente al momento de elegir el régimen tributario más adecuado. Al evaluar las opciones, es importante tener en consideración todos los aspectos que mencionamos anteriormente. ¡Elegí sabiamente y asegurate de cumplir con tus obligaciones fiscales de manera adecuada!
Para cualquier ayuda que requieras, no dudes en contactar a Tributo Simple.
